Gran Canaria
Nombre del proyecto: Participa Gran Canaria
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Desde el principio, en 2015, cuando Jorge Pérez Artiles, actual responsable de la Dirección General de Participación Ciudadana del Cabildo de Gran Canaria (gobierno insular), asumió el cargo, él y su equipo comenzaron a diseñar una nueva política pública que institucionalizara la participación ciudadana en la elaboración de políticas públicas en Gran Canaria.
Artiles se dio cuenta enseguida de que la democracia digital era importante para empoderar a la gente y hacerla partícipe de las decisiones públicas. Queríamos llegar a todo el mundo en Gran Canaria», dice, teniendo en cuenta que las tecnologías digitales de comunicación, como Internet y las redes sociales, ya estaban muy implantadas y eran muy utilizadas, sobre todo por los jóvenes.
Miró a su alrededor y se fue a Madrid en 2016 para ver cómo se estaba desarrollando y utilizando Cónsul por parte del gobierno de la capital y de Pablo Soto, ex-concejal de Participación Ciudadana y Transparencia e Innovación Social en el ayuntamiento de Madrid.
A su regreso, él y su equipo empezaron a buscar ingenieros informáticos y empresas y lanzaron una licitación para la implantación de la plataforma CONSUL DEMOCRACIA. Encontraron el socio adecuado en Laude y en 2018 terminaron la implantación y crearon la plataforma Participa Gran Canaria.
Todo comenzó como parte del movimiento político Podemos, y como parte de la coalición que el partido político formó con el partido socialista PSOE y con el partido local insular Nuevas Canarias - Blocque Canaristas. Una vez en el poder, Podemos inició la creación de una Dirección General de Participación Ciudadana, que entonces no existía. Artiles: «Era la primera vez que se iban a diseñar e implementar políticas públicas de participación ciudadana en el gobierno insular. Esa era mi misión».
Hasta entonces, este gobierno insular no tenía políticas de este tipo, ni tampoco las concejalías, los 21 ayuntamientos de la isla de Gran Canaria. Aunque ya era obligatorio, según la legislación nacional española, implantar la «participación ciudadana» en los ayuntamientos. Sin embargo, «aquello no tenía nada que ver con la inclusión de los ciudadanos en la toma de decisiones públicas», y sí más con la «participación social», mucho menos consecuente y no ligada a procesos políticos.
Entonces, ¿cómo fue empezar de cero? «Eso fue una ventaja», explica Artiles. «No tenía a nadie que decidiera lo contrario ni a nadie que opinara sobre esto, porque básicamente nadie sabía qué demonios estaba haciendo, era nuevo para ellos. Además: tenía el respaldo de uno de los tres partidos del Gobierno, Podemos».
El trabajo de creación de la política pública para el proceso participativo y su integración en los procesos gubernamentales tuvo tres vertientes:
trabajar dentro del gobierno para difundir y extender los mecanismos participativos;
promover esta nueva política pública de participación ciudadana en los 21 municipios de Gran Canaria;
y promover y apoyar económicamente a las asociaciones y colectivos de la isla, que serían socios y participantes clave en los procesos.
En Gran Canaria se han puesto en marcha procesos participativos en diferentes ámbitos, como las políticas urbanísticas y el desarrollo de los barrios, pero también en algo tan especial como la inclusión de determinados lugares de la geografía canaria en el catálogo de Patrimonio Mundial de la UNESCO. El actual Gobierno insular está presentando solicitudes en las áreas de biodiversidad y patrimonio cultural.
«Con los medios de que dispongo», dice Artiles, “intento demostrar que estos asuntos también requieren procesos participativos para decidir qué zonas se incluyen en las solicitudes de Gran Canaria ante la UNESCO”.
Otro aspecto importante de la promoción de la participación ciudadana en los ayuntamientos de Gran Canaria es la formación. El Cabildo de Gran Canaria lleva algunos años fomentando la formación y la participación en metodologías participativas y de gobernanza mediante la aportación de fondos a universidades y la formación directa a profesionales de instituciones públicas. Actualmente, por ejemplo, hay disponible un curso corto de 9 horas sobre metodologías de democracia digital.
Otras opciones son más profundas y extensas, como los estudios de postgrado sobre gobernanza y participación ciudadana que ofrece la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Artiles es el director de ese posgrado y ha codiseñado el programa académico. Los graduados han adquirido conocimientos en ciencias políticas, metodologías digitales y asuntos jurídicos, entre otros. Sin embargo, Partiles añade que «no se trata sólo de conocimientos, también de habilidades prácticas y de cómo organizar procesos sociales.»
El Cabildo de Gran Canaria ha utilizado la plataforma CONSUL DEMOCRACY principalmente para procesos participativos y también para consultas públicas (no interactivas).
Un ejemplo de consulta pública es la candidatura a la UNESCO. La propuesta de patrimonio mundial de Gran Canaria fue admitida por la UNESCO en 2019. Entonces, Partiles y su equipo crearon un proceso híbrido que combinaba procesos participativos presenciales y procesos digitales. «Lancé una consulta pública a través de la plataforma para medir el apoyo a esta propuesta, esto fue en 2019. Recibimos un apoyo abrumador».
Otro ejemplo se remonta a la pandemia de COVID-19, cuando el Cabildo de Gran Canaria lanzó una consulta para co-crear un plan de acción, un documento de política estratégica que abordara la recuperación social y económica post-COVID y estipulara políticas públicas concretas.
Partiles pone otro ejemplo. «Cuando redactamos el reglamento de participación ciudadana de Gran Canaria, publicamos el borrador en Internet para recabar comentarios y opiniones de la gente. Volvimos a utilizar un proceso híbrido
El principal reto, según Partiles, era implicar a la gente y hacer que participara en el proceso. «En el caso de la redacción del reglamento de participación ciudadana, no recibimos muchos comentarios. Esto es un gobierno insular, no un municipio. Los gobiernos municipales se ocupan de cosas cotidianas con las que la gente suele estar más comprometida y en las que probablemente será más probable que participe».
Un proceso actual es el proceso participativo sobre turismo y un modelo de desarrollo turístico sostenible con el que la gente pueda vivir. «Esto es importante. Implica a la gente. El debate público sobre el turismo en España comenzó en las Islas Canarias con una gran manifestación en la que la gente exigía un modelo de desarrollo turístico diferente. Dicen que el turismo está afectando a sus vidas por la falta de vivienda, los bajos salarios en el sector turístico, la pérdida de identidad cultural».
Aunque el turismo es importante en la economía local, muchos canarios empiezan a darse cuenta de que no es un tipo de turismo viable. Jorge afirma que la isla está «saturada» de turistas. «Doce millones de turistas visitan nuestra isla cada año, sobre una población total de 2,2 millones de personas».
También destaca la enorme desigualdad visible en el sector turístico. «Nuestra renta bruta se compone en un cuarenta por ciento de ingresos procedentes del sector turístico. El turismo es la 'locomotora' de la economía. La economía local de Canarias crece al cuatro por ciento anual, ni siquiera Alemania alcanza estos niveles de crecimiento. Pero al mismo tiempo nuestro nivel salarial medio es el segundo peor de España».
Artiles y su equipo en el Cabildo de Gran Canaria están diseñando el participativo sobre este tema urgente mientras wel escriben estas líneas (diciembre de 2024), pero ya hay un esbozo general. Artiles: «El primer paso del proceso será un cuestionario tanto por correo como a través de la plataforma. Luego, en febrero, lanzaremos una asamblea ciudadana para hablar del modelo turístico de forma colectiva con el mayor número de ciudadanos posible. Y después de la asamblea, habrá una consulta pública también a través de la plataforma».
